«Hablar de la Historia del Rock Argentino, encuentra en Almendra a uno de los grupos fundacionales, y a un músico de la talla de Rodolfo García, como baterista, voz y referente de una trayectoria tan rica, que no bastará una charla para plasmarla.»
En una tarde que nace templada del invierno en Buenos Aires, llegamos al Espacio para la Memoria y para la Promoción y Defensa de los Derechos Humanos (ex ESMA), para comenzar a descubrir a una personalidad generosa y dispuesta al diálogo, para recorrer una parte de sus comienzos que lo emparentan con el acordeón que le acercaría la tradición de su padre, y que con el tiempo gracias a la radio y a los primeros sonidos del rock, se viera atraido por la percusión y la nueva música que surgía en Argentina.
Hoy nos sentamos en un jardín que pertenece al lugar donde Rodolfo trabaja semanalmente: el Espacio Cultural Nuestros Hijos, un sitio donde se mezclan recuerdos díficiles de olvidar y al mismo tiempo, la convicción de generar una conciencia libre, creativa y renovadora para nuestra sociedad.
A través del diálogo se van tocando temas que nos hacen recorrer desde los inicios de Almendra, con su impronta de banda barrial que sacudió la mente y el corazón de generaciones, pasando por los nombres de Emilio del Guercio, Edelmiro Molinari y la eterna luz del Flaco Luis Alberto Spinetta. Con temas que han quedado como clásicos a través de las décadas.
Después el nacimiento de una banda que dejó huella en las que vinieron, con música entre lo sinfónico, el jazz y la canción: Aquelarre. A esa altura la originalidad le abrió la puerta a un estilo propio, único e irrepetible. Junto a Hugo González Neira en teclados, Héctor Starc en guitarra, Del Guercio en bajo y García en batería, se conformaba un grupo que sigue sonando tan vigente como en los setenta.
Rodolfo nos cuenta, reflexiona y se entusiasma cuando habla de música. Amplio conocedor de bateristas a los cuales destaca (por ejemplo Phill Collins) por su técnica y ser completos a la hora de cantar. De las influencias, que abarcan músicos de diversos géneros, y de ser alguien requerido por gran cantidad y variedad de artistas, algo que acepta como naturalmente lógico y enriquecedor.
Quedan en la charla, Tantor, Litto Nebbia, el Bicentenario, Las Bandas Eternas y varios puntos a tocar. El rol que asumió en el Bar La Perla, donde la música tiene un lugar de encuentro permanente con grandes de nuestro rock.
Su amistad con «el Flaco», entrañable, auténtica y eterna. Lo que estaba haciendo con él y lo que se viene.
«Muchos temas para un primer encuentro que deja lugar para seguirla, por ser un espíritu pleno de energía, generador de ideas, y con la música en el Alma». Ricardo Debeljuh
Video y fotografía, Hugo Yori.
Gracias, una vez más!!
ALMENDRA: Discografía:
Almendra (1969)
Almendra (1970)
Almendra en Obras I y II (1980)
El valle interior (1980)
AQUELARRE: Discografía:
Aquelarre (1972)
Candiles (1973)
Brumas (1974)
Siesta (1975)
Corazones del lado del fuego (1999)
En los últimos días, los amantes de la música de Luis Alberto Spinetta recibieron la gran noticia: el esperado disco de canciones inéditas está en etapa de mezcla y verá la luz antes de fin de año. Así lo confirmó Dante, hijo del «Flaco» y uno de los encargados de capitanear el proyecto.
El disco no es otra cosa que las grabaciones que se produjeron en las juntadas de Spinetta junto a Daniel Ferrón y Rodolfo García, incluso antes de Las Bandas Eternas.
El propio baterista de Almendra contó los detalles de ese trío bautizado como Los Amigos en una nota con La Voz del Interior «La historia del trío empezó acá, en mi estudio. Los primeros ensayos fueron con Emilio Del Guercio hace más de tres años. Tocábamos temas nuevos. Sobre la marcha apareció lo de las Bandas Eternas, que a mí me pareció algo digno de que se concretara por un reconocimiento a la obra de Luis. Emilio se bajó del proyecto para producir su programa en el canal Encuentro (Cómo hice) y entonces incorporamos a Daniel Ferrón, un bajista notable que participó conmigo en Posporteños, con Alejandro del Prado. Además, es un tipo recontra spinetteano. Era el más indicado. Empezamos a armar temas. Apenas terminaron las bandas, nos juntábamos una vez por semana», contaba Rodolfo.
«Tocamos durante mucho tiempo esas canciones. Unos meses acá, y después el Flaco puso su estudio. Así fue como desarrollamos el proyecto en su casa. Ensayando en el estudio de grabación, Luis dijo un día: “Grabemos estos temas que suenan fenómeno”. Grabamos dos temas, después otros dos, así se fue juntando el material que hay. En realidad, ensayamos más temas de los que quedaron grabados. Pero queremos rescatar estos y ponerlos en contacto con la gente. Había tres o cuatro temas más, habíamos recuperado Nirvana mañana y Trampaluz, dos piezas de Fuego gris. Sonaban como la puta madre», agregaba en aquella entrevista.
