En el programa radial RETRATOS EN LA CIUDAD que conducían Cristina Oller y Ricardo Debeljuh, en junio de 2004, se le hizo un reportaje a Oscar ‘Mono’ López, bajista y compositor, de extensa trayectoria. Dice de él, en un reportaje más reciente de 2009, que le hiciera nuevamente Ricardo Debeljuh, en el programa diario de actualidad de las 19 hs. por FM FAN 103.9 de Quilmes que conducían ese año Raúl Caballero y Fernando Gallo: «Oscar ‘Mono’ López es uno de esos tipos que vale la pena conocer y escuchar. Mezcla de humildad, sinceridad, talento, bondad y sensibilidad; logra transmitir armoniosas melodías, gestos despiertos y cálidas notas».
RICARDO DEBELJUH.- ¡Qué bueno tenerte en este programa, Mono! ¿Cómo anda tu vida?
MONO LÓPEZ.– Trato de ser un buen ser humano. Pasarla bien, y que la gente que me rodea esté bien. En cuanto al músico, estudio diariamente y toco seguido.
CRISTINA OLLER.- Contanos de tus comienzos en la música.
M. L.- Comencé con los chicos de Fugaz. Iniciábamos los ensayos apagando las luces y decíamos, imaginemos que estamos en medio del desierto. Luego tocábamos lo que a cada uno le parecía. Salían cosas alucinantes. Con un grabador chiquito registrábamos toda la zarpada. De lo que más nos gustaba salían los temas. Eso tiene mucha magia. Marcó el estilo del grupo.
Un día salíde un autoservicio y escuché un ruido que me llamó la atención. Me acerqué, me acerqué, y ese ruido cada vez era más hermoso. Era un grupo ensayando. Me quedé en la puerta sentado hasta que terminaron y toqué timbre. Me atendió Ricardo, me presenté como bajista y le dije que me había gustado mucho su música. Entonces me invitó a entrar. Charlamos y le propuse zapar un rato. Ricardo dijo que si, que probáramos, pero Alberto, el bajista del grupo, me dijo que el bajo no lo prestaba. Realmente me quedé paralizado, justo me decía eso a mí que siempre prestó el bajo a todo el mundo que me lo pide. Finalmente terminamos tocando en casa al sábado siguiente y terminamos realmente súper conformes con el sonido que logramos. A los 15 días me llamaron para invitarme a sumar a esa banda. Por esos días había estado tocando en mi casa con el primo de Pappo, Sergio Vidal, en guitarra, y con Eduardo Catresqui, un baterista que se fue a vivir al exterior. En esa época tenía un equipo Miura de 800 wats con 8 bafles con parlante de 12 pulgadas cada uno. Con todo eso cuando ensayábamos ¡se caía el revoque! Quien me marcó a fuego fue mi viejo. Que tenía una orquesta y me enseño el camino de la música. Era como un dios en la tierra. Después otros músicos fueron gravitando en mi cabeza. Entre ellos Frank Zappa, Jimmy Hendrix con su sentimiento, grupos como King Crimson, Pink Floyd.
Estudié sobre la base de Jaco Pastorius y Stanley Clarke en mi instrumento, el bajo. Pero he sido autodidacta y aprendí experimentando. Mi viejo, recuerdo que me dijo “lo más importante es aprender a estudiar”. Y sobre la base de eso me largué y aprendí.
R.D.– ¿Cuál es la temática que abarcan?
M. L.– La temática abarca desde el folklore hasta el heavy metal. Hay música clásica, jazz, hay hip hop, funky, rock and roll. A nivel producción me quisieron indicar el tipo de música que debía tocar. Y siempre me resistí porque he sido amplio en los temas que abordé.
Por eso digo que por suerte siempre hice lo que quise.
Hay gente que me dice “vos tendrías que estar lleno de plata con lo que sabés tocas”. Les contesto que me dejen tranquilo con lo mío, porque es mi estilo justamente lo que defiendo y mi forma de sentir la música.
Pero no es fácil sostenerlo algunas veces. Se hace difícil bancárselo.
Gracias a Dios tengo una familia que me banca, con la que pasé momentos complicados. Pero cada ladrillito que está puesto en mi casa está hecho con la música. Sufrí muchas cosas, entiendo que arrastro a mi familia y es un poco egoísta eso. Pero lo acepto y ellos a mí.
R.D. ¿Qué trabajos hiciste?
M. L.- Trabajé Entre el 1978 y el 1981 en “Jazz y Pop”, cuando iban los músicos más talentosos al lugar, que era del “Negro” González y Astarita.
Yo era el encargado de abrir y cerrar, y aparte tocaba todos los domingos. Un día me llama González por teléfono y me dice: “venite urgente que va a venir Chick Corea a probar el piano esta noche después de actuar en el teatro”. Desde ya, salí corriendo, y cuando llegué me encontré con el baterista que tocaba conmigo. A la noche, aparece Corea y nosotros ya estábamos enloquecidos. Por aquel entonces, me había roto el brazo y estaba enyesado.El yeso ocupaba todo el cuerpo y el brazo quedaba aprisionado dentro. Pero como mis amigos habían hecho un agujero, podía sacar los dedos y así ensayaba el bajo. Por miedo a no poder seguir tocando me la pasaba ensayando. Cuando llegó Chick Corea para probar sonido, le digo a mi baterista, “le decimos de tocar algo juntos”. Es que estudiábamos con los temas de él, como “España” por ejemplo. Y a pesar de que me dijo que “estaba loco”, fui y le dije, “maestro, nos permitiría tocar con usted el tema España, nosotros los admiramos y sería un sueño” La respuesta fue: “¿Pero cómo vas a tocar si estás enyesado?”. Le expliqué como podía tocar, y sorprendido accedió. Realmente ¡¡Un grande!!
C.O. Te puedo asegurar que muchos músicos nuestros tendrían que aprender un poco la humildad de esa gente. Porque no es que es uno solo.
El 98 % de los músicos de afuera que conocí son humildes. Ellos no se sienten ídolos, uno los hace ídolos.-
R.D. ¿Y cómo resultó?
M. L.- La cuestión es que tocamos, y fue impresionante. Nos felicitó, y nos dijo que iba a tratar de conseguir una beca para Berkley donde da clases.
Si pagábamos el viaje el curso iba a ser gratuito. Lamentablemente no pudimos costearlo, era caro para nosotros. Ahora existe una sucursal en Buenos Aires, desde hace un tiempo. Cuando llegó la noche, y la hora que tocara Corea, él entra y comienza a zapar y de pronto dice “voy a llamar a los chicos que trabajan acá que estuvieron tocando conmigo el tema Spain” Nosotros no entendíamos nada, nos mirábamos y decíamos, “¿¡Nosotros!?”
Subimos y nos hizo tocar delante del público, no lo podíamos creer. (Hasta aquí Retratos en la Ciudad)
Después de este reportaje de 2004, algunas pocas de las múltiples actividades y actuaciones relizadas por el Mono López nos las cuenta él mismo en SUPER ARTE: «Me dedico a producir y a tratar de que mi disco CAMINANDO SIN FIN pueda ser escuchado por el público. 2005: Soy integrante de una banda de funk-metal (REDENTOR) También me incorporo al elenco de una obra teatral y al grupo de música italiana AZZURRO.»
2007: Se reúne nuevamente después de 14 años, LA CARETA, con mi hijo YAMIL en guitarra, DAVID en voz, HERNAN en bateria y yo en bajo. 2008: Se incorpora el maestro ALEJANDRO PENSA en batería. Lanzamiento del cd ALERTA MUNDIAL de REDENTOR.(”https://super-arte.net/entrevista-a-oscar-mono-lopez-diciembre-2009/)
Reportaje Cristina Oller – Ricardo Debeljuh
Fotos: Laura Bareiro; Rocardo Debeljuh, facebook Oscar López